Este instrumento fue construido en el año 1873 por la firma E. F.
Walcker de la ciudad de Ludwigsburg (Alemania), y lleva el número de Opus 285.
Esta empresa fue fundada en 1780 por Johann Eberhard Walcker (1756-1843) en la
ciudad de Cannstatt, y continuada por su hijo Eberhard Friedrich Walcker
(1794-1872) en Ludwigsburg; este último logró llevar en el siglo XIX renombre y
prestigio nacional e internacional a la firma fundada por su padre. Con justeza
se considera a Eberhard Friedrich Walcker como uno de los grandes organeros del
siglo mencionado en Alemania, junto con Friedrich Ladegast y Wilhelm Sauer, por
la calidad de sus instrumentos y porque fue inventor de técnicas y nuevos
sistemas revolucionarios para la época.
Consola restaurada |
El órgano de la
Iglesia Santa Felicitas fue construido al año siguiente de la
muerte de Eberhard Friedrich Walcker, cuando la firma estaba a cargo de sus
hijos Heinrich, Fritz, Paul y Karl, quienes continuaron con las técnicas
constructivas de su padre. El órgano fue inaugurado junto con el templo en
1876; el suministro de aire se realizaba por entonces exclusivamente a través
de dos fuelles de cajón que oficiaban de bombas, como si fuesen grandes
émbolos. La iglesia funcionaba por esa época sólo como capilla privada de la
familia Guerrero, cuya residencia se encontraba a corta distancia, en lo que
hoy es la Plaza
Colombia.
Consola - Detalle |
En los años siguientes y hasta los primeros años del siglo XX algunos
organeros realizaron trabajos, habiéndose encontrado tarjetas del año 1885
adheridas en el interior del instrumento de los organeros Gaspar Rigotti y
Félix Rigotti (este último también compositor), y una inscripción de 1917 del
organero Carlos Hense (padre). Los trabajos realizados en la mencionada época
fueron los siguientes: intento de encerrar los tubos del segundo teclado manual en una caja
expresiva que nunca fue terminada, quedando sólo su parte frontal; una pisa no
original en la consola conducía un mecanismo al interior que pudo haber sido
pensado para activar esa expresión, pero que finalmente quedó vinculado a un
pequeño fuelle en el registro Rohrflöte 4’ del primer teclado manual, conformando
probablemente una suerte de experimento de Tremolo. Asimismo y probablemente a
comienzos del siglo XX, se instaló en la torre norte un pequeño motoventilador
eléctrico a correa junto con un canal de aire de madera, a fin de no tener que
generar el aire sólo manualmente. Este ventilador estuvo en funcionamiento
hasta comienzo de la década de 1990.
Registros - Detalle |
En 1981 la familia Guerrero cedió la iglesia a la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires, y
en 1983 comenzaron a realizarse periódicamente conciertos de órgano. En ese
momento realizamos un breve trabajo de puesta a punto y afinación para
posibilitar la correcta realización de tales eventos, pudiendo ya entonces
observarse un notorio grado de suciedad acumulada de vieja data en los tubos y en
el interior del órgano, quizá de comienzos del siglo XX. Por entonces la
iglesia era utilizada como capilla del vecino Colegio Santa Felicitas. Los
conciertos se dejaron de realizar en el año 1989. A mediados de los años
’90 la Municipalidad
realizó importantes trabajos de restauración edilicia en el exterior del
edificio, que estaba seriamente deteriorado por el paso del tiempo. En ese
entonces el órgano permaneció largo tiempo desprotegido, a merced del clima, de
animales y de personas que accedían libremente a la tribuna, provocando decenas
de roturas en los delicados mecanismos, y también alguna sustracción. Por esa
misma época también fue desmontado el antiguo motoventilador eléctrico que
suministraba el aire.
Registros - Detalle |
La situación de abandono del instrumento se revirtió cuando se nombró en
la iglesia un sacerdote rector, Padre Dante Galeazzi, quien se esmeró en evitar la continuación de
los daños. Así y todo y hasta fines de 2001 el estado del órgano era desolador:
el instrumento que hasta 1989 funcionaba muy bien estaba ahora sin suministro de
aire, con casi todas sus teclas caídas, con tiradores de registro y mecanismos
quebrados y algunos faltantes, con una capa de suciedad muy considerable, todo
ésto sumado al deterioro de la decoración del mueble del órgano, muy dañado por “grafittis”.
Tubos de madera - Detalle |
En noviembre de 2001 el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires dispuso la restauración
del instrumento, la cual concluimos en marzo de 2002. Las tareas que realizamos
fueron: limpieza e iluminación del interior del órgano, remoción de la
totalidad de los tubos para su limpieza y reparación, restauración de la
decoración de la caja del instrumento, restauración de los mecanismos dañados o
quebrados, reposición de elementos faltantes, confección de un primer fuelle
regulador de aire, instalación de un motoventilador, pulido de las teclas de
marfil, regulación de los mecanismos, armonización y afinación de los tubos.
El órgano posee un total de 783 tubos sonoros; la mayoría de ellos son
de aleación estaño-plomo, habiendo también otros de madera.
D I
S P O S I C I Ó N
Manual I (Do1 a FA5)
Principal 8’
Flöte 8’
Bourdon 8’
Placa recordatoria - Artífices |
Viola di Gamba 8’
Octav 4’
Rohrflöte 4’
Mixtur 2 2/3’
II / I
Manual II (DO1 a FA5)
Principal 8’
Lieblich Gedeckt 8’
Salicional 8’
Flauto dolce 4’
Pedal (DO1 a RE3)
Subbaß 16’
Octavbaß 8’
Violoncell 8’
I / Ped.
Pisas sobre la pedalera: Forte Man. I -
Tutti.
Fotos: Carlos Amadini